Todos los grupos religiosos y todos los senderos espirituales, poseen miembros que “muestran” sus sidhis (poderes espirituales capaces de transformarse en fenómenos objetivos en este mundo material). Todas estas personalidades se caracterizan por ser practicantes de austeridades; estas austeridades están relacionadas con los cinco sentidos, hablan el bien, desean el bien a toda la humanidad y por ello oran a cada instante; escuchan la palabra de Dios en todos los sucesos y en todos los objetos de la sus vidas; ve literalmente a Dios en todos los seres y todas las cosas.
Ninguno de estos seres santos “buscan” poseer sidhis, todos ellos coinciden en buscar la presencia viva y refrescante de Dios y de un modo inconsciente, ellos mismos van derramando ese amor en forma de gracia santa; si alguno les dice “tus sidhis” ellos responden: todo proviene de Dios, todo es gracia de Dios, sólo Dios merece ser llamado el “hacedor de milagros” o bien, “sólo soy un sirviente”.
Estos seres excepcionales se caracterizan por ser extremadamente humildes, la segunda característica es que viven en una intensa alegría interior y exterior y otra, es la extrema simplicidad de sus predicas, conocimientos, etc.
Ellos son verdaderamente renunciantes.
Ninguno de estos seres santos “buscan” poseer sidhis, todos ellos coinciden en buscar la presencia viva y refrescante de Dios y de un modo inconsciente, ellos mismos van derramando ese amor en forma de gracia santa; si alguno les dice “tus sidhis” ellos responden: todo proviene de Dios, todo es gracia de Dios, sólo Dios merece ser llamado el “hacedor de milagros” o bien, “sólo soy un sirviente”.
Estos seres excepcionales se caracterizan por ser extremadamente humildes, la segunda característica es que viven en una intensa alegría interior y exterior y otra, es la extrema simplicidad de sus predicas, conocimientos, etc.
Ellos son verdaderamente renunciantes.
